Deseo de Noah

Deseo de Noah

viernes, 19 de octubre de 2012

El deseo de Noah -Capitulo 18: La batalla final-


Capitulo 18 -la batalla final-

Cuando Dilan volvió a reaccionar, notaba la brisa en su cara. Alguien lo sostenía de los brazos, dejando el resto de su cuerpo flotando en el aire. Miró hacia arriba y vio a un chico rubio con expresión realmente seria. Sus piernas hicieron contacto con un terreno solido al fin y miró alrededor. Tres compañeros de su clase le esperaban ahí. Estupefacto por todo lo acontecido, no sabia que decir. Se dio cuenta que sus piernas temblaban y fue rindiéndose hasta sentarse en el suelo.

-Como...? Dan? Luke? ...Vicktor?- Cuando este escuchó su nombre miró hacia otra banda. Dan rió fuertemente y se apartó el cabello de la frente.
-Vicktor quería atacar al oscuro a lo loco, con sus manos.- Dijo la rubia, suspirando. Su mirada cambió a una seria.- Honey, como esta la situación?-
-Al parecer...Xaros es el oscuro- nadie se atrevió a decir nada.- Ella guardaba demasiada oscuridad dentro suyo y al parece explotó, creando a ese...monstruo.- Todos callaron.
-Tenemos...- dijo al cabo de unos minutos, con la cabeza baja.-...que matarla?- Honey se mordió el labio inferior indeciso.
-Noah pretende destruir y matar, si es necesario. Solo nos quedaría...matarla.- Vicktor dio un respingo y replicó.
-No podemos hacer eso! A ella no!- El uni-alado se giró hacia el chico moreno con el rostro afligido.
-Acaso no lo entiendes!? Ese monstruo ya no es ella! XAROS YA HA MUERTO!- vociferó con rabia, respirando fuertemente. Luke le rodeó con su brazo, a modo de abrazo para que se calme. Todos guardaron silencio, nadie se miraba a los ojos.
-Pero...yo he escuchado su voz...- susurro Dilan, golpeando el suelo con su puño. -Yo he escuchado su voz! Pidiéndome auxilio! Ella sigue ahí, dentro de esa...cosa!- Honey arqueó una ceja y Dan directamente no entendía nada.
-Pudiste oír su...voz?- Honey se llevó una mano a la barbilla y se quedó pensativo.- Tal vez...ella no saco su oscuridad hacia fuera, tal vez...ella fue absorbida por ella? Su cuerpo sigue dentro de el oscuro?- al decir eso, su mirada se iluminó.- Si eso es posible aun hay una posibilidad! Dan, chicos, aun podemos...liberarla!-
-Que hay que hacer?- preguntó Dan empuñando su guadaña. Su arma ya estaba bastante resquebrajada del mal uso que hacia de ella, pero su espíritu lo hacia mella en ella.
-Dilan es el único que puede escucharla...lo tendrá que hacer él.- El rubio levantó la vista, perplejo. -Se de un método de...pasar nuestros poderes, los míos y los de Daniela a ti. Podemos...darte poderes y podrías entrar dentro del oscuro...lo harías?- Dilan se levantó, aun con las piernas temblandole y asintió con la cabeza.
Honey le extendió la mano a Dan y esta se la extendió a Dilan, creando un circulo de tres. Una aura roja envolvió a Honey, mientras que una azul recorría el cuerpo de Dan. Estas dos auras pasaron entre las manos entrelazadas de Dilan y chocaron, para luego fusionarse. Envolvieron al chico en todo su ser para luego abrirse cual vaina y salir con una ropas completamente distintas  Llevaba unos guantes y botas de cuero, una camisa blanca de manga corta y pantalones negros hasta las rodillas,y su cuello estaba rodeado por una corbata roja. En su espalda llevaba un carcaj con algunas flechas y un arco de madera con apariencia bastante resistente.
-Un arco y flechas...?- Dijo el rubio dubitativo ante esas armas. Un arco robusto y firme y un carcaj con, justamente, 13 flechas. Eran pocas así que debía aprovecharlas al máximo  Honey y Dan se sentaron en el suelo, respirando con dificultad.- Estáis bien?!-
-Tranquilo...- dijo Dan entre soplidos y bufidos.- Te hemos dado una gran cantidad de poder y estamos mas débiles ahora...pero no es nada, verdad?-
-Si...- Honey se puso de pie mientras acariciaba a un preocupado Luke.- Ahora...debemos abrir algún tipo de entrada dentro del oscuro...Dilan, lanza una flecha, puede que con tu poder abras una brecha dentro suyo y puedas entrar. Nosotros dos distraeremos a Noah.- Dan dudó. Ella tiene una arma de corta distancia y era peligroso. Una voz detrás suyo replicó.
-Yo también quiero ayudar!- rogó Vicktor. Honey suspiró y sacó sus dos pistolas. Le lanzo una a Vicktor y otra a Dan.
-Chico, haz lo que puedas para evitar que ese monstruo se acerque a la población, Dan, tu usa mi pistola para atacar y haz algo con esa guadaña, no te servirá de nada...yo me enfrentaré directamente con ese maldito demonio...- antes de levantar el vuelo otro chico le agarró de la muñeca. Su mirada, triste y llena de preocupación, reflejaba lo inutil e ignorante que se siente sobre todo lo que esta sucediendo. Abrió y cerró la boca, intentando decir algo, pero su voz no surgia. Honey sonrió y le despeinó cariñosamente con una mano mientras susurraba algo inaudible. El otro chico simplemente se quedó sin respiración y sonrió levemente.

Dan cogió la pistola y se la ató al cinturón de su cintura. Dubitativa  concentró todo el poder que le quedaba en su guadaña para finalmente romperla en dos. Ante la mirada estupefacta de los tres chicos, la arma plateada brilló intensidad y se pegaron a los brazos de Dan, creando dos afiladas cuchillas que salían de los costados de dichos brazos. Vicktor cogió su pistola y apuntó al oscuro, Honey levantó el vuelo y Dilan sacó una flecha y tensó su arco.

En suelo se sacudió violentamente, con una furia descontrolada. Un alto edificio a unos cuantos metros suyos cayó como si de gelatina se tratase, y pareció que el edificio donde estaban ellos perdió altura. Luke tropezó y cayó al suelo y Dan casi cae al abismo del suelo si no fuera porque Vicktor la sujetó fuertemente de la muñeca.
-Chicos, mirad.- susurró Dan observando hacia abajo cuando todo el temblor pasó.- El oscuro esta produciendo a partir de esa cosa negra que emana mini-oscuros. Pero nos podemos encargar de ellos, verdad, Vicktor?- El moreno sonrió tímidamente al cargar el arma. Dilan se alegró de que Vicktor estuviera junto a alguien que lo apreciaba tanto. Vicktor se giró hacia Dilan y este se tensó.
-Dilan...- Le sonrió de forma tímida y extraña.- Lo siento por todo, y salvala  Eres el único que puede.- Dilan le devolvió la sonrisa y volvió a tensar el arco.

La flecha se impregnó de una aura blanca y disparó. Lamentablemente la flecha se desvió de su trayectoria y se perdió de vista. Una flecha menos, le quedaban 12. Volvió a tensar el arco y como antes, la envolvió una mística energía blanca. Esta vez si acertó en el cuerpo del oscuro, pero en vez de perforarlo, en el exterior del cuerpo apareció un circulo blanco flotante, con dibujos abstractos y runas antiguas, de una lengua perdida, tal vez. Dilan miró a los demás chicos y estos asintieron. Dio cinco pasos hacia atrás y corrió, dando un majestuoso salto y cayendo justo en el centro de aquel circulo blanco, que se cerró inmediatamente después de que desapareciera el joven. Ahora el tiempo se movía contrarreloj. Los muchachos. La ciudad, el mundo tal vez, he incluso en la realidad donde vivían  todo dependía si ese demonio salia victorioso.

-Que ha sido eso?- gruño Noah, avistando un haz de luz en un costado del oscuro. Intentó sacar sus manos, empapadas en una masa pastosa de oscuridad, para investigar que fue eso cuando una voz le llamó. El albino se giró hacia ese ser uni-alado y sonrió al ver que no llevaban armas. El rubio solo extendió sus manos, vacilante. Noah también extendió sus brazos, dejando que esa masa oscura y viscosa resbalase por sus manos. -Ves todo esto? Toda esa oscuridad lo esta produciendo ella. Es como una energía ilimitada. Nunca se agota, siempre produce mas y mas oscuridad.- Noah realmente resaltaba, su blanco contrastaba la oscuridad que le rodeaba. Volvió a hundir sus manos en esa pasta y cogió un poco de ella. Esta oscuridad se pegaban a sus manos, dejandole moldearla a su gusto. Esa deforme oscuridad se convirtió en dos largos látigos  Los lanzó hacia el rubio y este los esquivo. Esquivaba uno tras otra, cada vez mas rápido  -Como puede...?! No te cansas?!-

-La verdad, no- rió Honey esquivando de forma burlesca.- Antes me sentía agotado, pero ahora es como si...tuviera incluso mas energía que al principio.- Un látigo le rozó la mejilla y se la arañó, dejando una pequeña mota de sangre. Solo se distrajo medio segundo. Solo medio. Entonces sintió como algo pastoso y afilado le perforaba el estomago, dejándolo sin respiración durante unos segundos.

-Que estas haciendo, Luke?- Le gritó Dan disparando a los oscuros que habían a bastantes metros hacia abajo. Era mejor matarlos en la distancia. El chico estaba sentado en el suelo, cerrando fuertemente los ojos y mantenía sus manos entrelazadas. Susurraba algo en voz baja.
-Le estoy rezando a Dios.- dijo en un hilo de voz y sin abrir los ojos.-Le rezo para darle poder a Honey...es lo único que puedo hacer.- Vicktor rió ostentosamente.
-Sabes que no existe ningún ''Dios''?- Siguió riendo y disparo a unos oscuros.- Si existiera un ser superior benevolente no hubiera dejado que pasase esto.-
-Puede que sea así  pero...- un estruendo se escuchó en dirección donde el demonio y el uni-alado estaban luchando. Aunque había dejado de tener una ala. Ahora tenia dos, una negra y otra blanca que le acababa de salir. Aun a la distancia que estaban, se podía ver claramente al chico que flotaba alrededor del oscuro sacándose un tentáculo oscuro que lo conectaba a él por el abdomen.- Honey...!!- El chico aterrado se levantó y Honey flaqueó.
-...Sigue rezando, imbécil !- le gritó Dan a Luke y este obedeció, sentándose de nuevo en el suelo y adoptando la pose de antes, con los ojos cerrados y juntando sus dedos. Dan respiró aliviada al ver que Honey recuperaba altura y tenia esa sonrisa burlona en su rostro.- Es increíble  Luke esta lleno de ambición y deseos. Esos deseos son la potencia de nosotros. Aun no teniendo esos deseos cristalizados es capaz de enviar su poder a otra persona...no me imagino el poder que hubiera tenido si fuera uno de nosotros...aunque no quisiera que lo hiciera una persona tan inocente como él.- Vicktor en silenció asintió.
-Como le va a Honey?- preguntó tímidamente Luke, al no poder mirar para mantener su concentración. Dan siguió disparando a los oscuros y Vicktor miró la pelea. Honey dijo algo, seguramente para burlarse de Noah, y el demonio, lleno de ira, saltó encima del alado y los dos cayeron con fuerza encima de un edificio.  Vicktor vaciló sobre que decirle.
-Va...genial! Honey, ya sabes, tan burlón como siempre.- Vicktor se preocupó por el rubio, pero tampoco en exceso. Por lo que había visto, sabia cuidarse solo y sabia que saldría de aquella. Ese pensamiento le llevó a otro, y de la preocupación se obligó a exteriorizarlo.- Que estará pasando con Dilan...?- Los tres chicos pararon y guardaron silencio ante la duda.

Un rubio armado con un arco apareció en un páramo blanco. No parecía ser finito. Buscaba por todos lados alguna señal de vida. Entre ese blanco distinguió una mota negra. No sabia lo que era, si una persona o un objeto, pero corrió hacia él. Era todo lo que había allí. Se acercó lo suficiente para distinguir la figura de una muchacha joven de cabello largo y marrón chocolate. Estaba llorando, cubriendo su rostro con sus manos. Iba vestida con un traje negro roto por los extremos.
-Xaros...?- La muchacha siguió gimoteando en silencio. Dilan le puso la mano en el hombro pero ella le golpeó la mano, apartándolo. Levantó la cabeza, enseñando su rostro y su extraña mirada.  La muchacha era idéntica a la chica que venia buscando el rubio, pero algo le decía que no era ella. O que ahora ella no era ella. La chica se fue levantando lentamente. Tenia los ojos impregnados en furia. Su vestido destrozado, estaba bastante abierto por la parte del pecho, dejando ver en el centro una perforación. Allí incrustado estaba una gema negra con forma de rombo.

-No me toques.- tajante, la morena limpió su arrugado vestido sin prestar especial atención al muchacho.-No quiero que un producto de mis mentiras me toque. No eres real. Como yo. No soy real.-
-Como que no eres real?- Dilan no entendía nada y Xaros suspiró. Extendió una mano, para que miré lo que le rodeaba, la nada.
-Este sitio es el corazón de mi ''yo'', de Xaros. Yo solo soy lo que queda de ella.- La extraña chica miró de arriba abajo al rubio.- Y tu seguramente seras lo que queda del sentimiento del ''amor''.-
-Que? No! Yo soy Dilan, el verdadero.- ''Xaros'' arqueó una ceja y enseñó una risa torcida.-He venido a salvarte, a liberarte de esta oscuridad.-
-Liberarme? De la oscuridad?- La chica rió sarcásticamente y acarició la gema incrustada en su ser.- Ahora mi ''yo'' es la oscuridad. No puedes salvarme de ella porque mi ''yo'' forma parte de él- De debajo de los flecos de su falda salieron dos espadas negras. Estas flotaban alrededor de ''Xaros'', como si ella fuera un planeta y las armas simples satélites -Pero si de verdad eres el verdadero Dilan...no te dejaré escapar vivo por todo el sufrimiento que nos has hecho pasar a ''nosotras''.- Levantó los brazos y las espadas se alzaron. Estas se fusionaron creando una gran espada enormemente grande y grotesca, controlada por una energía misteriosa. Con un movimiento de muñeca de la mano izquierda, la espada se movía al son de la chica.

-Puede que ahora Xaros o...lo que quede de ella me odie...- Sacó una flecha y tensó su arco.- Pero no me voy a ir de aquí con las manos vacías.-
La muchacha sonrió complacida.
-Muchacho incrédulo.-

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